Autoridades estiman en 42% la probabilidad de El Niño Costero fuerte para el verano 2024

Aunque las proyecciones anteriores indicaban que la posibilidad de un FEN fuerte sería de 49%, en el último reporte del ENFEN la cifra descendió a 42%. Mientras se espera que la tendencia siga siendo a la baja, las autoridades mantienen el estado de alerta.

Hasta hace solo unas semanas, la Comisión Multisectorial del ENFEN señaló que el país podría afrontar la magnitud de un Niño Costero fuerte (49%). Sin embargo, la institución acaba de emitir un reciente comunicado (10 de noviembre), actualizando sus predicciones.
“Para el próximo verano 2024, en promedio, las magnitudes más probables de El Niño Costero son fuerte (42%) y moderada (41%)”, cita el documento.

“Ojalá que estemos en esta tendencia de bajada para que así podamos tener, por lo menos, una tranquilidad de que el inicio del verano, que es más o menos la segunda semana de diciembre, nos agarre con el mar lo más frío posible, para que así cuando entren las olas
de calor propias de la temporada, las lluvias no sean tan intensas”, sostuvo Patricio Valderrama, geólogo y expresidente del Senamhi, en diálogo con RPP.

Asimismo, el especialista enfatizó en que este comunicado mide la magnitud y no la intensidad, por lo que la situación no debe dejar de tratarse como una emergencia. De hecho, el ENFEN hace énfasis en que el estado de alerta en el país se mantiene. Asimismo, que se espera que el Niño Costero (región 1+2) se extienda hasta inicios del otoño del 2024.

De otro lado, sobre la evolución de El Niño en el Pacífico Central (región Niño 3.4), el ENFEN anota que se espera que dicho evento meteorológico tenga una magnitud de fuerte (62%) a moderada (31%). “El Fenómeno de El Niño Global tiene una categoría moderada en cercanía a los umbrales de fuerte y en diciembre veremos la etapa de maduración, en donde se suelen generar los mayores impactos”, explica Yolanda Gonzales, directora del Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño (CIIFEN).

Escenarios previstos, medidas necesarias

Por su parte, el Indeci señala que ante el escenario de lluvias intensas debido al FEN, se estima que más de 14 millones de habitantes de ciudades como Piura, La Libertad y Lambayeque serían los más expuestos a alto riesgo. Además, que alrededor de 354,042 viviendas, 8,100 instituciones educativas y 1,156 establecimientos de salud estarían expuestos a daños.

“En el 2017 vimos un calentamiento rápido de las costas de Ecuador y Perú, con valores arriba de los 2.5 grados. Sin embargo, este 2023 vemos un calentamiento más significativo, con anomalías de hasta 4 grados frente a las costas. Es por eso que nuestro mensaje es que tenemos que seguir preparándonos y adaptándonos a estas condiciones futuras, de fenómenos de El Niño de gran impacto”, enfatiza Gonzales.

Para Ricardo Giesecke, exministro del Ambiente, un tema fundamental que debe tratarse es que, como indica la ONU, los gobiernos deben establecer sistemas de alerta temprana que permitan estar mejor preparados frente a estos eventos climatológicos.

“Son muy importantes las alianzas estratégicas público-privadas de educación, de formación, de activación de alertas y de seguimiento a las comunicaciones oficiales de los gestores de
riesgo, que permiten a las autoridades nacionales y locales tomar todas las medidas necesarias”, destaca a su vez Gonzales. Para la directora del CIIFEN, estas son algunas de las lecciones más importantes que tenemos que aprender de los eventos meteorológicos y/o desastres naturales de los últimos tiempos:

· Preparación temprana y planes de contingencia

· Diseminación de la información a la comunidad

· Coordinación intersectorial

· Coordinación interinstitucional

· Articulación de acciones entre los niveles nacional, regional y local

· Preparación de la respuesta a nivel del sector privado y de la comunidad

· Instrumentos de política pública para la reducción de impactos

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