¿Qué se necesita para mejorar el acceso a la salud?

Estas Fiestas Patrias encuentran al país con serios problemas en el sector salud.  Los peruanos exigen medidas urgentes del Estado sobre la calidad de los servicios y el abastecimiento de medicinas en esta era de post pandemia. Por ello, este 28 de julio, hay temas fundamentales que no pueden dejarse de abordar. Aquí mencionamos algunos.

Según el Ministerio de Salud, en el país, 33 millones de personas tienen al menos  un seguro. Sí, 98.96% de los peruanos tiene, en teoría, una cobertura financiera de sus atenciones y puede tenerlas en el sistema público, que cuenta con 8,279 establecimientos de primer nivel de atención, 165 hospitales y 11 institutos especializados. No obstante, estos números no son de gran ayuda si en la práctica los centros médicos están colapsando y los asegurados no reciben la atención ni las medicinas que necesitan.

Como destacó el ex ministro de Salud, Abel Salinas, en la mesa digital realizada por ANACAB y el Diario El Comercio, “de qué sirve tener 8 mil establecimientos si no hay médicos, enfermeras, medicamentos e insumos”. 

Los especialistas en el tema coinciden en afirmar que, para superar este gran problema de salud es importante fortalecer la institucionalidad y contar con estabilidad para poder llevar a cabo los cambios que el sector demanda. Cosa que no hemos tenido en los dos últimos años, tiempo en el cual el país ha tenido seis ministros de Salud.

Asimismo, si queremos que nuestro sistema de salud avance en beneficio de todos los peruanos, hay medidas urgentes que los peruanos desean escuchar este 28 de Julio en el mensaje presidencial. Aquí comentamos algunos:

 

  1. Fortalecer la rectoría y gobernanza

Para mejorar el sistema de salud en el país, es fundamental que el Minsa y los organismos adscritos a este, como SuSalud y Digemid, refuercen su función rectora sobre todos los actores del sector, no solo con los particulares. Es decir, también supervisar de manera rigurosa a los fondos aseguradores públicos, como EsSalud y SIS, y a las entidades prestadoras de servicios del Estado y particulares. 

Además, es preciso asegurar una gobernanza basada en estándares de calidad, eficiencia y ética para poder brindar un servicio más ágil y de calidad a todos los ciudadanos. 

 

2. Digitalización del sistema de salud 

Para obtener datos fiables y potenciar los procesos de las diversas gestiones del sistema de salud, urge avanzar con mucha más rapidez hacia la digitalización. Entre los beneficios que trae consigo esta transformación está la historia clínica digital. Este modelo basado en datos puede brindar a los médicos acceso en tiempo real a información confiable y de calidad para tomar las mejores decisiones sobre los tratamientos del paciente y gestionar mejor los recursos. También evitaría que se dupliquen las pruebas de apoyo y permitiría que la historia médica esté disponible en todos los niveles de atención. Además, nos daría información sobre la carga de enfermedades de la población y nos permitiría proyectarnos. Consideremos que el último estudio sobre la carga de enfermedades es del 2016.

Por último, pero no menos importante, la digitalización contribuye a la transparencia y fiscalización. Por lo tanto puede reducir la corrupción de manera sustancial.

 

3. Separación de funciones 

Es un paso fundamental para lograr que la partida destinada al sector salud se traduzca en resultados eficientes y satisfactorios para la población. Esta fórmula, que se aplica en los mejores sistemas de salud del mundo, se basa en separar las funciones de financiador y prestador de servicios de salud.

El Estado debe ser el supervisor. También debe ser el financiador de la salud o, al menos, de una capa básica sobre la cual las personas puedan tomar seguros privados complementarios. En la prestación, es urgente que esta se abra al sector privado, que tiene una mayor flexibilidad y por lo tanto más capacidad para optimizar recursos y procesos. Por supuesto, el privado cobra por sus servicios, pero tenemos evidencia de sobra para afirmar que en salud pública lo barato, sale caro.

 

4. Promover las Asociaciones Público Privadas

El Estado peruano ya tiene experiencia negociando y supervisando contratos que garantizan que el servicio llegue a la población. Los resultados los tenemos a la vista en los hospitales Alberto L. Barton del Callao y Guillermo Kaelin de Villa María del Triunfo, en la logística de Essalud en Lima y Callao, y en los servicios oportunos de bata verde y bata gris del Hospital del Niño de San Borja. Solo en los dos primeros, tenemos 500 asegurados de Essalud que acceden a citas y cirugías oportunas, que siempre encuentran el medicamento que necesitan, que acceden rápidamente a las especialidades médicas si lo requieren, a usuarios satisfechos y a una empresa que cumple sus compromisos. ¿Qué nos impide replicar esta buena experiencia?

Con la implementación de medidas como estas estaremos más cerca del objetivo de tener “más salud para más peruanos”. Si seguimos haciendo lo mismo que hemos hecho hasta hoy, no esperemos un resultado distinto.

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